La prima Yamilet me llamó para contarme que por la Aduana de Maiquetía anda de jefezazo el capitancito Toño Vargas. Lo pusieron en 2009 y tiene un padrino poderoso, un viejito que hace años anduvo en las guerrillas, pero que ahora anda bien pero bien eléctrico. Toño vio en la aduana la forma de hacer su platica sin mucha inversión. Por eso empezó a preparar unos guisos riquísimos. Se habló con los verificadores, los que validan los documentos y dan veredicto a las mercancías que pasan y los invitó a sus guisos.
Lleva más de un año en ese negocio culinario y ya tiene un apartamento en la Guaira que compró y que antes lo tenía alquilado, una camioneta Hilux nuevecita y una finca por los lados del Sombrero en Guárico. Se anda comprando su propio helicóptero Bell 412 en llave con Pablito Herrera, coronelcito que tiene un negocito llamado Élite que compra y vende unas lanchas bien bonitas en Tucacas y en Lechería. La de Lechería la atiende la esposita de Toñito. Parece que el helicóptero se lo van a alquilar a una petrolera china.
La prima Yamilet me contó que sus empleados andan bravos con Toño porque no quiere dejar para nadie. Allá en Oriente lo conocen, sobre todo por los carros que se gasta y los apartamantasos, casitas y galpones.
